Entre paso y paso, levantando la pesadez de mis pasos que buscan su propio rumbo, me encontre sentado con actitud pasivamente espectante a mi pasado, allì y aquì, frente a mi presente aguardaba mi pasado con ojos de un niño que imagina la mirada de un anciano...
Esa pesadez de pronto se desintegró para adoptar una nueva forma, que aún navegaba en su transe....transe de un puente que une y separa...que aleja y que acerca, que seduce y que asusta, que se asoma y se esconde....
El hecho es que me tope de forma absolutamente involuntaria con un pasado que poco recuerdo, con un antes que carece de detalles pero que se presento con toda la intensidad de su esplandor...y casi aún dilucidando entre lo que es, parece que fue o realmente fue...yo vivo con la incógnita de un pasado que pertenece poco a mi memoria pero que habita simultànamente en cada parte de este ser que se constuyó y destruyó y continùa su proceso eterno de desintegraciòn permanente que no reconoce las normas establecidas del tiempo...pero que si reconoce y adopta cada una de las capas que instantáneamente su psiquis sugiere...
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